Se nos insiste a los pastores y a los fieles que suframos y amemos junto con las personas interesadas, debemos ofrecer una ayuda fundada conjuntamente en la verdad y en el amor.
La misión evangelizadora es de todos los cristianos y de todas las edades. Cada etapa de la vida tiene sus dones que aportar a la construcción del Reino de Dios. Las personas jubiladas tienen nuevas posibilidades de compromiso voluntario.
La relación conyugal es uno de los más fuertes motivos y razones para vivir, llena la vida de energía y de felicidad pero también se puede convertir en un infierno.